Casi todos los activos registraron ganancias en 2025, con el oro, la renta variable y el crédito beneficiándose de las condiciones financieras más favorables y del impulso de la IA. A pesar de los aranceles, las tensiones geopolíticas y el pronunciado cierre gubernamental registrado en Estados Unidos, la economía global ha resistido múltiples impactos. Los sólidos márgenes de beneficio, un mercado laboral estable y un sólido gasto de consumo han contribuido a sostener el crecimiento y mejorar las previsiones. Los análisis coinciden en que la IA impulsa la rentabilidad del mercado y abre nuevas oportunidades, con aumentos de la inversión y la productividad que se extienden mucho más allá del comportamiento bursátil. El desarrollo de centros de datos e infraestructura impulsaron el crecimiento en todos los sectores, ofreciendo a los inversores nuevas vías de participación. También fue muy rentable la inversión en oro.

Sin embargo, el índice bursátil estrella de 2025 es el Ibex, donde la IA -y el oro- brillan por su ausencia. Y es que el subidón de los bancos, y los máximos históricos de Iberdrola e Inditex (ésta justo para apoyar el rally final de diciembre) han propiciado su mejor año en este siglo. Con cotizadas de economía tradicional, y en un país donde el turismo brilla más que la innovación tecnológica. ¿Eso es un seguro para cuando llegue el tan anunciado........

© Vozpópuli