Por la puerta del sol -226-: Desde el leve rescoldo de mi fe
Vivencias, a solicitud de un asiduo lector de esta página.
Si algún día lejano perdí la fe en encontrar certezas, hoy me mantiene viva la esperanza de salvar el alma, justo ahora que inicié un diálogo perenne con el único Padre Celestial que reconozco, que me ayuda a llenar los huecos de mi silencio y mis solitarios ponientes que como el sol se dispersan entre nubes y sombras al final del día, terminando en solo oscuridad.
Tal vez nunca pueda escribir mis memorias (cuesta mucho hacerlo). Allí podrían ver todo lo que fui, lo que aprendí, lo que viví etc. y lo que me faltó ser y disfrutar. Me quedaré con mis monólogos sublimes y también con los agrios, con mi música preferida y también con esa tierna música que duerme siempre entretelas del corazón.
Siempre me opuse a esa realidad que con frecuencia susurra al oído que la felicidad es........
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