El fracaso del bicentenario
Falta menos de un mes para conmemorar el bicentenario de la independencia y, con excepción de Sucre, el país no está viviendo ninguna fiesta.
El impacto de la crisis económica no da para sonrisas y, para colmo, la proximidad de las elecciones acapara gran parte de la atención ciudadana. Es lógico: entre reflexionar sobre lo sucedido hace 200 años y pensar en lo que pasará en el país el 17 de agosto, la gente tiene bien claras sus prioridades. Y es que, además de lógico, es obvio: importa el bolsillo, no la historia.
Pero las centurias son irrepetibles puesto que solo ocurren cada 100 años. Un bicentenario es una efeméride excepcional y no debería pasar desapercibida.
A principios del siglo XX, los estudiosos comenzaron a hablar de los centenarios, tanto los de las revoluciones como el de la independencia.........
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