Nuevo elogio del imbécil
Cuando pensamos en personas famosas que la mayoría considera poco sesudas nos vienen a la mente, principalmente, los influencer. Esas personas que hacen o dicen tonterías pero que, aún así, son seguidas por miles o millones de personas que las juzgan merecedoras de ser referentes de algo. Así es como vemos personas que comen jabón por desafiar a millones, o nos “enseñan a ser millonarios” siendo paupérrimos en realidad, o quienes ponen en peligro sus propias vidas buscando likes.
Pero no podemos limitarnos a los influencer o a los miembros de la farándula para identificar que existen muchos “poco inteligentes”. Si ponemos en un ring a Trump y a Petro, por ejemplo, veremos dos opuestos intelectuales; uno con monosílabas y diálogos de escasísimas palabras, y otro con una verborrea exagerada; pero ambos destacándose en una cosa que los identifica: Parecen enemigos de la sensatez, de la inteligencia. Y ni qué decir de Maduro y Ortega, o incluso Boric (Que en su pasada visita a Japón en un discurso habló de Pokemon).
Acabo de leer el libro Nuevo elogio del imbécil, de Pino Aprile, un destacado periodista y escritor italiano que se ha impuesto lo que podría ser, una tarea monumental (O quizás no, dado el argumento de su libro): Convencernos de que la inteligencia es cada vez más escasa, por lo menos en los seres humanos; de que son cada vez más el número (Miles de millones según el autor) de estúpidos (No peyorativo, simplemente la designación de poca inteligencia). Una conclusión un poco más técnica del libro es a la inversa: La inteligencia no necesita ya a los seres humanos.
El autor reconoce en su libro que es difícil que reconozcamos que, lo que supuestamente nos hace humanos, está en tendencia a........
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