Como un vaso de cristal lleno de agua cristalina
El 13 de mayo de 1917 tres niños de Aljustrel, en Portugal, estaban jugando encima de la pendiente de la cova de Iría. De repente, aunque el día era soleado y no había nubes, vieron como el resplandor de un relámpago. Echaron a correr para volver a casa por miedo a que estallara una tormenta, cuando vieron algo sorprendente. Cito literalmente cómo lo cuenta la mayor de esos niños, llamada Lucía, en sus memorias: “Al llegar poco más o menos a la mitad de la ladera, muy cerca de una encina grande que allí había, vimos otro relámpago; y, dados algunos pasos más adelante, vimos sobre una carrasca una Señora, vestida toda de blanco, más brillante que el sol, irradiando una luz más clara e intensa que un vaso de cristal, lleno de agua cristalina, atravesado por los rayos del sol más ardiente”.
En el Evangelio de este domingo, san Lucas nos dice que Pedro, Santiago y Juan acompañaron a Jesús a un monte y él se puso a orar. San........
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