El problema de la vivienda, sin solución bajo el capitalismo
Elena es una trabajadora de 33 años que cobra 1600 euros y paga 500 euros por una habitación. A pesar de que su salario supera el umbral de dignidad, le es imposible alquilar un piso de 70 metros porque su coste se comería más de la mitad de su nómina.
Para Elena lo que el PP ofrece en esta materia no es una solución: plantea un aval para que se pueda pedir prestado el 20% del importe de la vivienda que no cubre el préstamo. Además, exonera de pagar una serie de impuestos asociados a la tramitación de la compraventa. Con todo, Elena no podría pagar las sustanciosas cuotas de la hipoteca porque tiene el vicio de comer todos los días, además de la obligación de pagar la luz, el agua, la calefacción y el gasoil del coche con el que se desplaza a su trabajo. Y es que si algo ha demostrado la experiencia histórica-tiempos de Aznar- es que la liberalización completa del suelo que los de Ayuso propugnan no abarata la vivienda sino que, por el contrario, la encarece por la especulación que induce.
Pero lo que los de Sánchez ponen sobre la mesa tampoco sirve demasiado a nuestra protagonista. Subir el IVA a los pisos turísticos no va a contener su proliferación incontrolada. Las ayudas directas a los jóvenes llegan a muy poca gente y, al igual que las exenciones fiscales a los propietarios, suponen transferencias de........
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