¿Y si Cambio?: Rompamos el silencio y hablemos del miedo al embarazo temprano
Como madre sé que el viaje de la maternidad está lleno de momentos hermosos y también de grandes desafíos, especialmente cuando nuestra hija entra en la adolescencia y tiene su primera menstruación. Es un momento donde muchas mamás, producto de viejos patrones, creencias y experiencias sienten mucho miedo, particularmente le embarga el temor al embarazo temprano y, aunque es natural sentir preocupación, es necesario mantener la calma y educarse en materia sexual del adolescente.
La adolescencia no es solo un período de cambios físicos evidentes, es una etapa de profunda transformación psicosocial y emocional. Sus hijas están construyendo su identidad, buscando autonomía y explorando el mundo que las rodea. Este proceso implica:
- Búsqueda de identidad, donde quieren saber quiénes son, qué les gusta y qué las define.
- Necesidad de pertenencia, donde es normal que quieran encajar, buscar su grupo y amistades.
- Desarrollo de la autonomía, donde quieren tomar sus propias decisiones, lo que a veces puede parecer rebeldía.
- Cambios emocionales intensos y pueden pasar de la alegría a la tristeza en cuestión de minutos. La incomprensión de estos cambios puede llevar a conflictos.
- Exploración de su sexualidad, a medida que sus cuerpos maduran, también lo hace su curiosidad y conciencia sobre la sexualidad.
Romper el silencio y enfrentar el miedo
Es comprensible que el embarazo adolescente genere angustia. Sin embargo, el silencio, la evasión o la sobreprotección no son las herramientas más efectivas. Cuando evitamos hablar de sexualidad o solo nos limitamos a “cuídate, no vayas a salir embarazada”, estamos perdiendo la oportunidad de educar, empoderar y fortalecer la relación con nuestras hijas.
Imaginen por un momento que su hija entra en un terreno desconocido sin un mapa ni brújula. Si no les proporcionan la información y las herramientas adecuadas, buscarán respuestas en otro........
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