Sobrevivir a junio
Fuengirola llena: junio en esplendor. / álex zea
De repente la calor. Ya. Sin vuelta atrás. Uno rebusca las camisas de lino, desempolva las bermudas, amnistía a las camisetas y abdica de cierta pretensión de elegancia. Se impone enseñar carne para no asarse. Es una brusca bajada a la realidad. «Quien vive en las nubes está a merced del viento», nos tiene dicho Benjamín Prado. No sé si la frase me gusta o disgusta, si la entiendo, si vivo en las nubes y si estar a merced del viento es síntoma de ser un veleta sin criterio o de ser alguien sabio que se deja llevar por tan fresquito conductor, el viento. No hay ninguno ahora, ningún viento, y en mi escritorio solo entra por la ventana rumor de........© La Opinión de Málaga
