Descertificación: entre la estrategia y el riesgo
Cada 1° de septiembre, el presidente de Estados Unidos informa al Congreso qué países productores o de tránsito de drogas ilícitas cumplen y cooperan, o incumplen, los objetivos de las convenciones internacionales sobre estupefacientes. Con base en esta evaluación, los países pueden ser plenamente certificados, recibir una certificación con interés nacional o ser descertificados. En este último caso, las sanciones pueden ir desde la pérdida de ayuda económica y militar hasta restricciones comerciales y una crisis de confianza para inversionistas y turistas.
Colombia ya conoce el impacto de esta medida. En 1996 y 1997 fue descertificada. Aunque no derivó en sanciones extremas, sí deterioró su imagen internacional, afectó la confianza inversionista y generó mayores controles en el comercio exterior. Hoy, el país........
© El Informador
