Cine y “contra historia”: Marc Ferro
Un viejo documento audiovisual hizo cambiar profundamente de opinión al insigne historiador francés Marc Ferro (1924-2021) y de esta manera crear su gran contribución al análisis histórico, lo que él llamó “contra historia”. Sucedió que ve un pretérito filme de 11 de noviembre de 1918 en donde los alemanes festejaban con gran regocijo la victoria germana en la Gran Guerra. Había, pensó entonces este integrante de la Escuela de Anales, otra manera de interpretar los hechos históricos, y que las imágenes podían de hecho convertirse en documentos dignos de ser tomados en cuenta por los historiadores de la misma manera que las fuentes escritas, un salto epistémico del papel al celuloide, una tarea que no le resulta fácil.
La “contra historia” se afinca en la idea de que hay diferentes miradas o historias paralelas. Estamos condenados a la interpretación, había dicho Nietzsche. La Revolución rusa de 1917, por ejemplo, no fue una revolución hecha por los obreros, como sostenían los gastados manuales de historia de la Academia de Ciencias de la Unión Soviética. El músculo principal y decisivo de ese formidable hecho histórico de octubre de 1917 fueron los soldados, campesinos y mujeres, asienta Ferro. La “Nomenclatura” gobernante en la extinta Unión Soviética, tildó estas opiniones de Ferro de “basura”, pero luego le dieron la razón. La misma persona que escribió aquella ofensa fue la que lo condecoró años después, “porque mis trabajos, comentó Ferro, le habían abierto los ojos respecto de la manera de hacer historia, en el sentido de que esta puede ser aprehendida de maneras múltiples.”
Pero en el interior de la Escuela de Anales había la misma desconfianza hacia el cine como documento histórico, una como herencia no notada del positivismo del siglo XIX. Hablar de cine en la universidad era una muerte asegurada. El mismo Fernand Braudel, director de Anales tras la muerte de Lucien Febvre en 1955, le dijo en una ocasión a Ferro: “Haz tu tesis doctoral y no hables de cine”. A pesar de ello comenzó a gestarse la corriente cine-historia desde el año 1968, cuando presenta Ferro su película El año 17 con gran éxito. Cuando terminó el film, el público se levantó aplaudiendo, pues era primera vez que veían a Lenin, Trotsky y Stalin moviéndose y........
© El Impulso
