¿Datos biométricos seguros?
Los datos de reconocimiento facial y de huellas dactilares es algo con lo que ya cuentan una larga lista de instituciones públicas y privadas. Ahí tienen los bancos los datos para acceder a cuentas mediante huellas digitales, aplicaciones con reconocimiento facial y de voz, y muchas otras herramientas a las que se les da acceso pleno sin saber cómo se utilizan.
También los datos biométricos los tienen el Instituto Nacional Electoral (INE), el Servicio de Administración Tributaria (SAT) que lleva Antonio Martínez, e igual la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) que tiene al frente a Juan Ramón de la Fuente, y sin olvidar la Secretaría del Bienestar que tiene una larga lista de datos de millones de beneficiarios de programas sociales; todos en algún momento, entidades públicas y privadas buscaron crear una gran base de datos biométricos para intercambiar información y disminuir principalmente los fraudes, pero nadie lo logró.
Ahora ya es oficial, en el futuro inmediato la nueva CURP biométrica estará en marcha, al aprobarse la Ley Nacional para Eliminar Trámites Burocráticos, lo cual puede ser una buena idea, pero desafortunadamente dado los “ahorros” que desde el sexenio pasado se aplicó en no renovar contratos de seguridad informática, y usar programas gratuitos, ha significado que millones de datos de mexicanos e instituciones públicas estén en venta en la dark web, lo que ha hecho prender las alarmas.
De entrada, implicará una reestructura para el SAT, en el manejo de la información de los datos biométricos de los contribuyentes, anticipa la Comisión Técnica Fiscal del Colegio de Contadores Públicos de México, que preside Roberto Colín Mosqueda.
Y es que una vez que entre en vigor esta CURP, el SAT ya no tendrá necesidad de resguardar datos biométricos de los contribuyentes, sino vincular sus sistemas con los servidores de la........
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