Juan Hurtado Cano

No puede ser menos la satisfacción y la alegría que vivimos los demócratas del mundo al conocer la noticia de que se le otorgó el Premio Nobel de Paz a la valiente líder americana María Corina Machado, luchadora incansable por la libertad y la democracia de nuestra hermana República de Venezuela, agobiada por la dictadura de los sátrapas corruptos Chávez, Maduro y Diodados de la peor calaña continental que oprimen a su pueblo con persecuciones, torturas, y lo último que cometieron: el escandaloso robo de sus elecciones del año pasado, generando la diáspora de 8 millones de compatriotas que lloran su dolor por el hambre y las afugias provocadas por esa camarilla de narcotraficantes, hoy apoyada por este dictadorzuelo de Colombia, que piensa y delira más por los sucesos bélicos extranjeros que por los problemas sociales de nuestro país en crisis, sin salud, sin seguridad, sin créditos del ICETEX, sin vivienda popular y otras desventuras.

María Corina Machado es el mejor ejemplo de las últimas décadas en este mundo agobiado por conflictos de diversa naturaleza, ella desafiando todas las adversidades para erguirse como la mayor líder que hoy tanto admiramos los colombianos y los demócratas del mundo, y a pesar de las falaces felicitaciones del expresidente Santos, el segundo Judas de la humanidad, que traicionara a nuestro líder Álvaro Uribe y vuelve a entregarle el país al terrorismo para buscarse un premio espurio........

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