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Cancelaciones de deudas y movilizaciones campesinas en Europa de la Antigüedad al siglo XX

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Fuente : Via Campesina, https://viacampesina.org/fr/evenement/17-avril-journee-internationale-des-luttes-paysannes-pour-la-defense-des-semences-paysannes/

En 2025 conmemoramos el 500 aniversario del enorme levantamiento campesino que sacudió toda la región germánica, desde Alsacia hasta Austria, pasando por la mayoría de los principados de Alemania y la Suiza de habla alemana. En 1524-1525, al menos 300 000 campesinos participaron en el movimiento insurgente. El movimiento fue aplastado en mayo de 1525 y la brutal represión provocó la muerte de al menos 100.000 campesinos y campesinas. Entre las razones de la revuelta, el nivel insostenible de la deuda campesina desempeñó un papel importante. Uno de los principales líderes del levantamiento, Thomas Münzer, predicador opuesto a Lutero, afirmó que era necesario establecer en la tierra un sistema basado en los Evangelios, lo que implicaba la cancelación de las deudas y la igualdad de riqueza. En esta contribución, Éric Toussaint repasa los grandes movimientos campesinos que han marcado la historia europea desde el Atlántico hasta el Mar Caspio, desde el Báltico hasta el Mar Mediterráneo y la tradición de las cancelaciones de deudas.

Sommaire

Advertencia del Autor respecto a la versión en español del artículo: todas las referencias a los números de páginas de las obras citadas se refieren a las obras en francés, tal como aparecen en la bibliografía final. Cuando existe una versión en español la obra está referenciada también en su versión española.

El papel histórico de la deuda en la explotación del campesinado

Durante cinco milenios el endeudamiento de las y los campesinos ha constituido una forma de explotación y desposesión que ha producido repetidamente levantamientos en el campo y que repercutió en las ciudades.

El proceso de explotación y desposesión por la deuda es simple: el prestamista exige al prestatario que ponga como garantía lo que posee. Se trata, por ejemplo, de la tierra poseída y cultivada por la o el campesino, y/o sus herramientas y el ganado. El reembolso del préstamo se realiza en especie o en moneda. Como el tipo de interés es alto, el prestatario, para pagar el préstamo, se ve obligado a transferir al prestamista una gran parte del producto de su trabajo y se empobrece. Si entra en mora, el prestamista le despoja del bien empeñado. En algunas sociedades esto puede, además, dar lugar a la pérdida de la libertad del deudor y/o de los miembros de su familia. Es la esclavitud por deuda.

Desde hace 5.000 años la deuda privada ha desempeñado un papel central en las relaciones sociales. La lucha entre ricos y pobres, entre explotadores y explotados ha tomado muy a menudo la forma de un conflicto entre acreedores y deudores. Como señaló David Graeber, con notable regularidad las insurrecciones populares comenzaron de la misma manera: con la destrucción ritual de los documentos relativos a la deuda (tabletas, papiros, pergaminos, libros de cuentas, registros fiscales...) [1]. En varios casos, la lucha por la cancelación de la deuda dio lugar a situaciones revolucionarias.

Antes de llegar a la Edad Media y al contexto de la guerra de los campesinos alemanes, cabe destacar que la práctica de las cancelaciones de deudas tiene toda una historia. No podemos entender las ideas en cuyo nombre se movilizó el campesinado alemán si no tenemos en cuenta la fuerza de la tradición de las cancelaciones de deudas en la visión cristiana original del mundo. Thomas Münzer, al igual que los numerosos predicadores radicales de su época y los líderes de las luchas campesinas, reivindicaba los evangelios y consideraba, en particular, que debía llevarse a cabo la cancelación de las deudas.

Pero, ¿de dónde viene esta tradición de cancelación de deudas?

El origen de las cancelaciones de deudas

En Mesopotamia, durante la Edad del Bronce, los monarcas decretaban periódicamente cancelaciones de deudas que tenían como objetivo restablecer la paz social, poniendo fin al endeudamiento abusivo que conducía regularmente a la esclavitud por deuda y la desposesión completa [2]. Hubo una treintena de cancelaciones generales de deudas privadas entre 2400 y 1400 antes de la era cristiana. Estas cancelaciones beneficiaron principalmente al campesinado. Uno de los decretos de anulación especificaba que los acreedores oficiales y los recaudadores de impuestos que han expulsado a las y los campesinos deben indemnizarlos.

También hubo cancelaciones de deudas decretadas por emperadores asirios en el primer milenio a.C. y por faraones en Egipto. En el siglo VIII a.C. aparecen en Egipto decretos de cancelación de deudas y liberación de esclavos por deudas. Este es el caso del reinado del faraónn Bocchoris (717-711 a.C. J-C).

Más tarde, esta tradición, aunque abandonada en la práctica, se integró en el judaísmo y luego en el cristianismo original como principio fundacional. La tradición de las cancelaciones generalizadas de deudas ha sido parte de la religión judía y de los primeros textos del cristianismo a través del Deuteronomio, que proclama la obligación de cancelar las deudas cada siete años, y el Levítico, que lo exige en cada jubileo, es decir, cada 50 años [3]. La prohibición de los préstamos con intereses también formó parte de los principios de la religión cristiana, el judaísmo y más tarde el Islam.

En el "Padrenuestro", la oración más conocida de Jesús en lugar de la traducción actual "Señor, perdona nuestras ofensas (pecados) como nosotros perdonamos a los que nos ofendieron", el texto griego original de Mateo (cap.6, versículo 12) dice: "Señor, anula nuestras deudas como nosotros anulamos las deudas de los que nos las deben". Además, en alemán, holandés y sueco, la palabra "Schuld" expresa tanto el pecado como la deuda. Aleluya, término que es un signo de alegría y se utiliza en las religiones judía y cristiana, proviene del idioma hablado en Babilonia en el segundo milenio antes de la era cristiana y significaba la liberación de esclavos por deuda [4].

Cabe destacar que la tradición de la cancelación de las deudas cada 7 años y con motivo del jubileo cada 50 años, nunca se respetó porque entraba en contradicción con los intereses de las clases dominantes y los diferentes modos de producción que se sucedieron a partir de la segunda mitad del primer milenio antes de Cristo. Cuando hubo cancelación de la deuda, fue producto de grandes movilizaciones populares y grandes crisis dentro de las clases dominantes.

En la época de la antigüedad griega y romana el endeudamiento de los campesinos, que había adquirido enormes proporciones, condujo a la esclavitud por deuda y provocó repetidas revueltas. En Atenas, las reformas de Solón en el siglo VI a.C. condujeron a la cancelación de la deuda y a la prohibición de la esclavitud por deuda [5].

Al comienzo del feudalismo en Europa occidental, una gran parte de los productores libres fueron esclavizados porque el campesinado endeudado era incapaz de pagar sus deudas. Así ocurrió durante el reinado de Carlomagno a finales del siglo VIII y principios del IX [6].

A partir del siglo XIV una serie de poderosos movimientos campesinos de protesta sacudió Europa occidental y central. En los siglos XIV y XV, asistimos a una sucesión de grandes movimientos campesinos en Flandes, Francia, Inglaterra, Bohemia y Alemania.

Los cosechadores, Pieter Bruegel the Elder Netherlandish, 1565, The Met, CC, https://www.metmuseum.org/art/collection/search/435809

Sucesión de grandes movimientos campesinos en los siglos XIV y XV en Europa occidental y central

La guerra del campesinado alemán de 1524-25 forma parte de un movimiento que comenzó dos siglos antes con grandes movilizaciones campesinas en Italia, en el Piamonte, bajo la dirección de Fra Dolcino [7] (1300-1307), en Flandes (1323–1328) [8], en Francia (Revuelta de los Pastorcillos en 1320, la Grande Jacquerie de 1358 en una vasta región al norte de París [9], Revuelta de los Tuschins en Languedoc 1381-1384...), en Inglaterra (revuelta liderada por Wat Tyler y John Ball [10] en 1381) que marcó el siglo XIV. La guerra del campesinado alemán también prolonga en cierta medida el gran movimiento husita y los taboritas que habían sacudido Bohemia en el siglo XV [11]. Sin olvidar en España la guerra de los Remensas (1462-1485) que había dado lugar, excepcionalmente, a una cancelación de las deudas de las y los campesinos concedida por el poder real para restablecer su control sobre Cataluña [12].

En todas estas movilizaciones de la Edad Media encontramos como puntos comunes: la oposición del campesinado a los privilegios de la nobleza (los señores feudales) y del alto clero que están exentos de impuestos, el rechazo de las corveas y los impuestos abusivos que afectaban muy duramente a las familias campesinas, la voluntad de defender las tierras comunales contra su apropiación privada por parte de la nobleza y el alto clero, el acceso a los bosques con el derecho de recogida de madera muerta, el acceso a los ríos y estanques con el derecho de pesca, la oposición a las deudas abusivas y a los préstamos con interés usurario y la exigencia de cambios profundos en la forma de hacer justicia. Donde todavía se aplicaba la servidumbre: la aboliciónn de la servidumbre. En algunos casos se encuentra el requisito de la expropiación de los bienes de la Iglesia Católica. En el movimiento campesino de 1524-1525 se exige así mismo la elección de sacerdotes por parte de los feligreses, el derecho a revocarlos y sermones acordes con los Evangelios [13].

Hacia la gran revuelta campesina germánica de 1524-1525

Extensión geográfica de la Guerra de los Campesinos Alemanes desde Alsacia hasta Austria. Fuente: https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/8/82/Karte_bauernkrieg3.jpg

En un texto anónimo que circuló en Alemania a partir de 1521 se podía leer este diálogo entre un campesino y un notable que describe bien el uso de la deuda para despojar al trabajador de su herramienta o de su tierra:

Campesino: ¿Qué me trae? Bueno, me gustaría saber a qué dedica su tiempo.

Notable: ¿Cómo debería pasarlo? Estoy aquí sentado contando mi dinero, ¿no ves?

Campesino: Dígame, señor, ¿quién le dio tanto dinero como para que usted pase su tiempo contando?

Notable: ¿Quieres saber quién me dio este dinero? Te lo diré. Un campesino llama a mi puerta para pedirme que le preste 10 o 20 guldens. Le pregunto si tiene un buen terreno. Él dice: "Sí, señor, tengo una buena pradera y un excelente campo que ambos valen cien florines". Respondo: ’¡Perfecto! Compromete tu prado y tu campo, y si te comprometes a pagar un gulden por año de intereses puedes tener tu préstamo de 20 guldens ". Contento de escuchar tan buenas noticias, el campesino responde: "Con mucho gusto le doy mi palabra". "Pero tengo que advertirte", añado entonces, "que si no honras tu pago a tiempo tomaría posesión de tu tierra y la haría mi propiedad. Y esto no preocupa al campesino, compromete su pasto y su campo hacia mí. Le presto el dinero y él paga los intereses puntualmente durante uno o dos años; luego se produce una mala cosecha y pronto se retrasa en el pago. Confisco su tierra, le expulso de ella y su campo y su prado son míos. Y lo hago no solo con los campesinos, sino también con los artesanos [14].

De 1470 a 1525, una multitud de levantamientos campesinos desde Alsacia hasta Austria, pasando por la mayoría de las regiones de Alemania,........

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