Mala política, peor gestión
He tenido que acudir cuatro veces a Correos interesando la situación de un simple envío --¡“certificado”!)— dirigido a un colega parisino. Al principio de la búsqueda sólo recibí los larrianos “vuelva Ud. Mañana” que cuando ya bramé amagando con una reclamación legal se transformaron en inútiles consultas al destinatario y a los servicios franceses, para finalmente devolverme mi envío. La agencia privada a la que recurrí entonces me cobró medio riñón por repetir el intento y conseguirlo en tres días. Confieso que mi devoción por lo público nunca estuvo más debilitada.
Correos es la mayor empresa pública que pagamos entre todos en España. Tiene, como es sabido, cerca de 60.000 trabajadores entre contratados eventuales y funcionarios, y parece que no hay forma de paliar la reducción de su cuota de mercado ni su cifra de negocios. Conocemos mejor su catastrófica situación financiera que en 2022 alcanzó los mil millones de euros. Y ha sido gestionada últimamente por dos cuestionados presidentes: el propio jefe de Gabinete de Sánchez, que cobraba........© Vozpópuli
visit website