La falta de agua potable también provoca desnutrición infantil
La desnutrición crónica infantil afecta a millones de niños y niñas en el mundo. Tradicionalmente se ha vinculado este problema con la falta de alimentos, pero diversos estudios demuestran que el acceso a agua segura y condiciones adecuadas de higiene y saneamiento son factores clave para su prevención.
Según datos de UNICEF, cada día 6 000 niños y niñas de menos de 5 años mueren por causas relacionadas con la desnutrición. Sin embargo, muchos programas no incorporan intervenciones de agua, saneamiento e higiene (WASH, por sus siglas en inglés), pese a que cerca del 50 % de los casos de desnutrición infantil están vinculados con un acceso limitado a agua segura y a condiciones inadecuadas de saneamiento e higiene en el hogar.
El consumo de agua no potable y las prácticas de higiene inadecuadas provocan infecciones y enfermedades diarreicas recurrentes. La diarrea crónica impide la absorción de nutrientes esenciales, lo que debilita el sistema inmunológico y perpetúa el círculo de desnutrición.
Un ejemplo lo podemos encontrar en Ecuador donde, según la © The Conversation
