¿Por qué la ciencia y el arte se necesitan?
¿Realmente existe una mirada científica opuesta a una visión artística del mundo? Si repasamos la historia del arte y de la ciencia, encontraremos una respuesta rotunda.
Así, hace décadas que el historiador británico Martin Kemp ha analizado esta cuestión a través de sus estudios sobre la figura de Leonardo da Vinci, que encarna la fusión originaria de ciencia, naturaleza y arte. Sus estudios científicos no solo documentaron el cuerpo humano y la naturaleza con precisión, sino que generaron nuevas perspectivas estéticas en la pintura y la escultura.
Más tarde, en el Barroco, el entendimiento de la perspectiva y el desarrollo de la óptica matemática permitió a artistas como Caravaggio (1571-1610) o Diego Velázquez (1599-1660) crear efectos dramáticos de luz y espacio.
Los avances científicos del siglo XIX marcaron profundamente obras como Frankenstein (1816) de Mary Shelley, donde la idea de dar vida a un ser humano a través de la electricidad se basaba en los experimentos de Luigi Galvani (1737-1798).
La observación de formas orgánicas a través del microscopio abrió a algunos artistas, como Joan Miró (1893-1983) o Vasili Kandinsky (1866-1944), una increíble ventana a un universo de formas. Como muestra el documental Proteus, científicos como Ernst........© The Conversation
