¿Cuándo se jodió el Jorge Chávez?
Tras seis semanas con el nuevo aeropuerto, está claro que nos dieron gato por liebre. Siendo la empresa alemana FRAPORT dueña del 80% del concesionario LAP, se esperaba que el nuevo gran terminal aéreo del Perú tuviese mínimamente el nivel de sus pares europeos (Zurich, Ámsterdam, Frankfurt, Madrid). La triste realidad es que este terminal no compite siquiera con los de Bogotá, Quito o Santiago.
La frustración empieza antes de llegar, en el cruce de la avenida Faucett con Morales Duárez y Línea Amarilla, donde la falta de un intercambio vial —o al menos semáforos bien programados— genera embotellamientos insufribles. Tras sortear el acoso de los........
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