Bienvenidas a mi 'haul'
15/02/202415/02/2024 Freepik.
Contrariamente a la opinión general, adoro las tardes de los domingos porque no tengo nada que hacer. Es entonces cuando me puedo recostar tranquilamente en el sofá, o, al menos, en el trozo del sofá que Perro Bonito me permite ocupar, tapadita con mi manta, escuchando de fondo episodios de true crime de Oxygen del tipo Mujeres asesinas, Parejas asesinas o -mi favorito de siempre- Enterrado en el jardín, mientras me hago la manicura y ojeo el móvil.
Y fue en una de esas ociosas y placenteras tardes de domingo cuando, entre reels de Star Wars, consejos que jamás seguiré por pereza y falta de habilidad para el pelo rizado, perretes y gatetes, me encontré ante un género que desconocía: los hauls de Zara. Estos vídeos -los hay de otras marcas también, pero de una forma extraña y misteriosa la empresa gallega ha conseguido auparse al podium de lo aspiracional- consisten en ver a una mujer abriendo ante la cámara su pedido online, para después mostrar lo que se ha comprado mientras comenta lo que opina de las nuevas prendas y se las prueba o no ante la cámara porque, por lo visto, esta parte es opcional.
Reconozco que al principio estos vídeos me fascinaron porque me encanta la moda y porque también tengo una vena cotilla, pero no tardé en sentirme abrumada, pues son cientos de mujeres las que cada día producen vídeos similares y yo creo que es imposible que se puedan permitir comprar esa cantidad de ropa y, mucho menos, llegar a ponérsela, pues reciben dos, tres, cuatro paquetes varias veces por semana para así poder mantener las visitas y los likes en sus perfiles.
Así que hice un cálculo rápido y, salvo María Antonieta y Catalina la Grande, no hay mujer que pueda tener tanta vida social, eventos, tiempo y oportunidad para llevar toda esa ropa, aunque solo sea una vez, por lo que deduzco que una vez hecho el vídeo estas chicas tienen que ir a la tienda más cercana para devolver la compra. Esto significa que esa ropa sale de un almacén, se trasporta, se lleva a sus domicilios y luego se devuelve en una tienda y una vez allí... a saber qué se hace con ella. Mirad, solo de pensarlo ya me está........
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