Trabajadoras sexuales tienen derechos
La marginalidad, lo moral e hipócritamente establecido, prejuicios sociales, el ámbito de la conciencia religiosa y el pecado, las necesidades humanas de subsistencia, los hogares destrozados con carga de violencia intrafamiliar, entre otros, contribuyen ineluctablemente a que la transición al umbral de la prostitución por la inocente mujer que descubre en su anatomía un desesperado escape y solución inmediata para subsistir.
Sea esta una decisión propia que, usualmente, las malas amistades con sus insinceros consejos y los proxenetas encubiertos que desdibujan con retruécano la sórdida realidad de la prostitución, inclinan a su ejercicio.
Por lo expresado, estas dignas mujeres merecen un tratamiento igualitario ante la ley, pues una sociedad moderna y justa no discriminará, estigmatizará, menos satanizará esta actividad, que es una natural consecuencia del instinto o pulsión sexual humano que preserva la especie. Las trabajadoras sexuales necesitan con prioridad disponer de un seguro médico.
Es paradójico que, aunque sea por interés comercial, pues son 90.000 más o menos, las trabajadoras sexuales en........
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