No creo que se sorprenda nadie si hago constar que hace ya tiempo la mayoría del personal dejó de informarse leyendo el periódico, y lo digo con la pena de quien se dedicó y se dedica a este oficio. Y así nos va. Está comprobado que las nuevas generaciones, cuando quieren enterarse de algo, acuden a las redes sociales, ese sumidero en el que campa a sus anchas lo peor de la ultraderecha neonazi, donde se esparcen bulos, mentiras, insidias e insultos contra los adversario/enemigos políticos (de izquierdas, por lo general) que calan en las mentes incautas, pedestres y acríticas de los asiduos. Dedicados esos estercoleros digitales a desprestigiar y difamar a los políticos progresistas, no es de extrañar que más de 800.000 forofos indocumentados con ganas de cachondeo votasen a esa cosa que inventó el tal Alvise Pérez titulada “Se acabó la fiesta”. El tal........

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