Nada es lo que parece en Venezuela
Decían que el régimen al fin iba a caer de Maduro, pero nada de nada. Ahora empezarán las protestas y las acusaciones de fraude electoral. Pero las elecciones del domingo y sus presuntos resultados no tienen mucha pinta de que cambiarán o de que serán sometidos a una autentificación medianamente seria. Solo lo haría con el baño de sangre que prometió Maduro. El dictador se apresuró a declarar su victoria por un 51,2 por ciento de los votos sin esperar a que terminase el recuento. Se autoproclamó vencedor sin más. Nicolás Maduro lleva en la política de extrema izquierda desde los doce años. Y viviendo muy bien a la sombra de Chávez y luego como heredero tantos años que él mismo ya se ha olvidado de lo que es vivir fuera de palacio.
La votación........
© La Voz de Galicia
visit website