Falta un mediador, como cuando se negocia con Puigdemont
Begoña Gómez es una ciudadana particular, sin rango de Estado, que, como la mujer del portero de la Moncloa, sólo se representa a sí misma. Las ofensas de Milei debe plantearlas con una demanda por vía civil en defensa de su honor., intimidad y propia imagen. Y si cree que se le ha atribuido un delito, debe presentar una demanda de conciliación, previa a querella, por injurias y calumnias. El Estado es otra cosa. Aparte, la crítica a Sánchez, que fue grosera, se realizó dentro de un acto político de partido, de modo descortés y exagerado, en territorio español, pero habitual en el escenario de la política, lo mismo que hizo antes Puente con claras insinuaciones sobre si Milei se droga que, aunque luego las envainó a medias, no tuvieron rectificación oficial alguna por parte del Gobierno del que formaba parte.
¿Pero cómo es posible que a nadie se le ha ocurrido cómo resolver el problema diplomático entre el Reino de España y la República........
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