Una fiesta empiñada
Nadie se preocupa de ocultar su animadversión mutua ni siquiera en un día que debiera ser de unidad, de envainar las espadas y proceder a una celebración festiva. Desde hace varios años eso es impensable en la fiesta de la Comunidad de Madrid, presidida por Isabel Díaz Ayuso, que ha hecho de su enfrentamiento con el Gobierno central, o más concretamente con Pedro Sánchez, el principal motivo de su acción política, aunque ella podría decir que hay una reacción simétrica por parte del inquilino de La Moncloa, del que considera que las decisiones que adopta tienen como finalidad perjudicar a su comunidad, de la que no soportaría su buena marcha económica.
El enfrentamiento entre los gobiernos central y autonómico sería digno de mejor causa y roza posiciones infantiloides. Ayuso está más que molesta........
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