No, no es demagogia ni una broma de mal gusto, ojalá lo fuera. Pero es que el anunciado “Plan de acción democrática”, de Pedro Sánchez, es de todo menos democrático y sí un paso más en el camino en este libertinaje institucional camuflado de buenismo al que nos quieren someter. Intentar reformas constitucionales encubiertas con el fin de controlar el Poder Judicial es un paso más. Vigilar las instituciones y organismos públicos -como el CIS de Tezanos-, con comisarios políticos que lo fiscalicen todo a su imagen y semejanza, es estalinista. Reescribir el Código Penal para poder beneficiar, presuntamente, a aquellos cuyos intereses le puedan beneficiar, como la recién aprobada ley de amnistía, es antidemocrático. Aprobar una financiación singular para Cataluña rompiendo la igualdad económica y fiscal entre españoles con el........

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