FUTURO DE LAS CIUDADES.
He dudado mucho si tiene sentido hacer una pregunta de aquellas que ahora se dice “existenciales”.
Y también dudo en afirmar si nuestro tiempo rehúye las preguntas profundas. No me cabe la menor duda que si se duda es ponerse serio. Y nuestro tiempo no está para gestos de mala cara. Sonría y ya está la foto. No sea pendejo, no se amargue la vida.
Bueno entre preguntas existenciales, dudas de si es pertinente hacerlas y tanto empaque brillante, tanta envoltura en todo de colores y de frases para llamar la atención. Me dije, pues bueno, no las hacen voy a acordarme de Dostoievski y del profeta Jeremías y de mi profesora de literatura que me recordaban que de vivir nadie se ha muerto y que la muerte le llega siempre aún a los más vivos.
Así que entré al negocio.........
© La Crónica del Quindío
