Cambiar prácticas en educación y producción de conocimiento
El presente tecnocientífico digital nos exige modificar muchas de nuestras prácticas cotidianas en el contexto de la educación y la producción de conocimiento. Por siglos el conocimiento estuvo centrado en nuestro cuerpo, en nuestra memoria y capacidad de comunicación y lenguaje biomecánico.
Técnicas de memorización, mnemotécnicas, nos ayudaron a preservar relatos colectivos en la tradición oral del lenguaje. Luego, la escritura fue la tecnología que nos permitió comunicarnos y preservar el conocimiento, como una memoria extendida en diferentes soportes materiales hasta llegar al papel y la invención del libro o códex, primero manuscrito y luego impreso, como desarrollo de la mecánica moderna en la máquina denominada imprenta. Diferentes modulaciones se fueron agregando a los libros y la imprenta como vehículo de conocimiento.
La comprensión y manipulación de la ondas eléctricas y electromagnéticas permitió a la humanidad aventurarse en otros formatos y medios........
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