Alguien lo ha definido como «el gran hermano en los hoteles», no porque tenga semejanzas con el bodrio ese que pasan por televisión, sino por la más pura concepción orwelliana de una situación tiránica de control sobre la ciudadanía, ejercida desde ese ‘ministerio de la verdad’ que se nos cuenta en la famosa novela de George Orwell. Me refiero a ese decreto de octubre de 2021 en el que se establecen las normas sobre las informaciones personales que los hoteles, agencias y demás operadores turísticos deben facilitar a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado sobre todo aquel que se aloje en un hotel, en una casa rural, encargue un viaje a una agencia, alquile un coche…L

El real decreto ha estado oculto una buena temporada (tres años), quizá consciente el ‘Ministerio de Nuestra........

© Heraldo de Aragón