Pymes, el motor probado en el mundo y la oportunidad pendiente en México
"El progreso económico no es automático; surge del dinamismo de las pequeñas unidades que innovan, compiten y arriesgan": Joseph Schumpeter.
Hablar de crecimiento económico sin mencionar a las pequeñas y medianas empresas (pymes) es imposible. En el mundo representan la columna vertebral de la economía. En México también lo son por número y empleo generado, pero aún están lejos de desplegar todo su potencial productivo.
El término pyme surgió en Europa tras la Segunda Guerra Mundial, cuando era necesario diferenciar a las grandes corporaciones industriales de las empresas familiares que requerían políticas específicas de financiamiento y capacitación. En América Latina apareció en los años 60 y 70, aunque en México no se institucionalizó con fuerza hasta los 90, con los programas de la entonces SECOFI (hoy Secretaría de Economía).
Actualmente, las pymes mexicanas representan el 99.8% de las unidades económicas, generan el 70% del empleo formal y aportan cerca del 50% del PIB, según el Inegi. El reto no está en su peso estadístico, sino en su competitividad: se trata de millones de negocios atomizados, con bajo acceso al crédito y limitada adopción tecnológica.
La experiencia global confirma que el fortalecimiento de las pymes impulsa el crecimiento sostenido:
Estados Unidos. Tras la posguerra, las pequeñas empresas absorbieron mano de obra y facilitaron la transición hacia una economía de consumo masivo. Hoy representan el 99.9% de las compañías, generan el 44% del PIB y el 46% del........
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