El subsidio unificado al empleo
A inicios de julio recién pasado, el Gobierno ingreso con suma urgencia a la Cámara de Diputados un proyecto de ley que busca reorganizar la oferta de subsidios al empleo formal. La oferta actual es compleja y probablemente no lo suficientemente generosa ni amplia como para conseguir los efectos deseados. La idea del rediseño es bienvenida, toda vez que tiene el potencial de elevar su eficacia. El proyecto unifica en un solo subsidio tres de los programas que hoy complementan los ingresos de trabajadores formales y/o que bonifican a sus empleadores: el Subsidio al Empleo Joven (SEJ), el Bono al Trabajo de la Mujer (BTM) y el Subsidio Previsional para Trabajadores Jóvenes (SPTJ). El SEJ entrega recursos a trabajadores formales entre los 18 y 25 años de edad pertenecientes al 40% más vulnerable del Registro Social de Hogares y que ganan hasta unos 660 mil pesos al mes.
También entrega fondos a sus empleadores, de modo de motivar tanto la participación laboral como la contratación formal. El BTM tiene un diseño similar, focalizado en mujeres entre los 25 y 59 años, y que se paga por a lo más 4 años continuos. Por su parte, el SPTJ bonifica las primeras 24 cotizaciones previsionales de trabajadores jóvenes. Los subsidios son incompatibles entre sí y son........
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