De Mosquito a Flash
Édgar García Ochoa fue un niño de Manga, que durante sus primeros años además de pequeño, presumía ser fuerte y atrevido.
Jugó baloncesto en La Salle y burló muchas veces los saltos de Raúl Vargas, Peye González y el pulso del Guaca Martínez.
Por sus veloces manotazos para quitar el balón, el entrenador Miguel Zapata, dijo: “Es un mosquito”, y con ese apelativo se quedó por esos años. Optó por visitar a Rafael Escallón Villa, director del Diario de la Costa. Rafael fue quien descubrió en él la audacia de hacer periodismo con un propósito y lograr acceso a visitantes famosos. A partir de ese momento, se dio a conocer en una columna bajo el seudónimo de FLASH.
OpenAI abre la puerta:........
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