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Nuestros impuestos en ‘bodegas’

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Durante su controvertida y muy comentada alocución del pasado martes, el presidente Petro insistió en que si el Congreso no aprueba su propuesta de ley de financiamiento, el Estado colombiano colapsará en la quiebra y, como consecuencia, “nos hundimos en la barbarie y la violencia”. Es verdad que la situación fiscal del país es realmente delicada y sus efectos empiezan a conocerse en casi todas las entidades del país. Lo curioso es que, mientras los recursos se vuelven más escasos, el Gobierno ha decidido despilfarrar decenas de miles de millones en una apuesta de agresiva propaganda digital. La misma semana que Petro alertaba sobre la necesidad de una nueva ley de financiamiento, el director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) advertía que la desfinanciación de la entidad reducía su capacidad de respuesta ante escenarios de desastres. Mes a mes, la opinión pública ha conocido los casos de varias entidades públicas que, dado el contexto de falta de recursos, no han podido pagar salarios a sus funcionarios y contratistas. La respuesta del Gobierno, en cabeza del Ministerio de Hacienda, es desconcertante y causa más preocupaciones que certezas hacia el........

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