âPero disminuyó la pobrezaâ¦â
La trama rocambolesca del huachicol fiscal, o sea, el contrabando de combustible, pone en muy mal lugar el sexenio de López Obrador, que, dicho sea de paso, tampoco parece limpio de chapopote cuando se habla del otro huachicol, el normalito, de tuberÃas picadas y bidones de gasolina a precio amigo. ¿Se acuerdan? El sexenio glorioso del tlatoani poco menos que empezó con una crisis de gasolina en la Ciudad de México que, con caradura, el oficialismo intentó convertir en una guerra a muerte contra el robo y/o contrabando de gasolina, y que, según el propio presidente, fue una guerra exitosa.
Ahora sabemos la verdad: que los combustibles ilegales circulaban briosamente por las venas de la Cuarta Transformación,........
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