INNOVACIÓN SOCIAL EN EL USO DE DROGAS: NUEVOS PARADIGMAS
Uriel Escobar Barrios
Como psiquiatra, especialista en servicios de salud y con experiencia en el ámbito de la salud pública, he acompañado a numerosas personas y familias afectadas por los trastornos por uso de sustancias. Esta experiencia en primera línea me ha convencido de algo crucial: la estrategia de décadas centrada únicamente en la prohibición y la criminalización ha fracasado. No ha reducido el consumo y ha generado estigma, sobrecargado el sistema judicial y alejado a las personas de los sistemas de salud que requieren. Hoy necesitamos con urgencia mirar este complejo problema a través de un nuevo lente: el de la innovación social. La innovación social no se trata de tecnología de punta, sino de un cambio profundo de mentalidad; implica dejar de ver a la persona que consume drogas como un delincuente para verla como lo que es realmente: un individuo que sufre, que enfrenta dolor, trauma o exclusión, y que necesita ayuda, no una celda. Es, en esencia, trasladar la respuesta del ámbito de la seguridad al ámbito de la salud pública y los derechos humanos. ¿Cómo se traduce esta innovación en la práctica? Se materializa en programas prácticos, colaborativos y centrados en la persona. Un ejemplo es la Reducción de Daños. Esta estrategia, avalada por la OMS, acepta la realidad pragmática de que el consumo existe, y se enfoca en minimizar sus consecuencias negativas –como sobredosis, infecciones y exclusión social–, sin exigir necesariamente la abstinencia inmediata como condición para recibir........
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