TRES DÍAS EN EL INFIERNO. Realidad en un cuento Territorial
Por: Luis Miguel Cárdenas Villada
Por primera y única vez, narraré la vivencia personal suscitada en una mal llamada “clínica”, por considerar el relato, una obligación moral, aunque no soy cultor de la ética, por la convicción de su formalidad. Lo que es ético para unos, no necesariamente lo es para otros, pero lo esencial del cuento, es poder contar una realidad, poniendo mi experticia como argumento y la formación académica como sustento.
Soy economista en pregrado, especialista formado y certificado, Magister en estudios urbanos regionales y un sin número de cursos, diplomados y seminarios, que no viene al caso mencionar; además, soy tratadista, columnista y chismoso de mesa de café concert, es decir, académico o intelectual.
Como se lo dije a uno de los séquitos del diablo (médico pretencioso, despectivo e insolente que me atendió, que olvidó los más elementales actos de cortesía que deben regular la conducta humana, por ostentar el presuntuoso sustantitvo de doctor, que posiblemente ni tenga, por ser esta dignidad diferente a la de médico).
Sin ostentación de mis grados de instrucción, me encanta que me traten de Don Miguel, como muchos lo hacen, o simplemente Luis Miguel o profe. No es una autoalabanza, es un reconocimiento no impúdico, para tener la credibilidad que se necesita en estos momentos de fervor.
El averno descrito o infierno de castigo se le llama rimbombantemente Clínica los Rosales, haciendo sustantivo su actividad de servicios de salud, donde el que tiene moneda se hospeda, sin que esto garantice que lo van a atender adecuadamente y el que no, se jode; pequeño territorio localizado en la parroquia pereirana, siendo a la vez esta capital de un departamento que da risa, si se trata de considerar sus verdaderas, auténticas responsabilidades y competencias. Es también la parte centro occidental del país de la belleza, teniendo pobladores con sentido práctico temporales denominados, enfermos, otros, enfermeros, para connotar toda la pléyade de científicos, técnicos, administrativos, vigilancia, auxiliares con sus jefes o dueños perce.
Su espacialidad como caracterización necesaria de territorialidad determina un uso poco conforme de servicios de salud, debido a sus asimetrías no resueltas en materia dimensional y atributos; su estructura económica es de propiedad privada donde lo público es el........
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