Caso Jasiel, realidad que golpea
El pasado miércoles 2 de julio, alrededor de las 11 de la noche, Jasiel, un niño de 8 años, desapareció en el parque del fraccionamiento en el que vivía en la capital de Chihuahua. Estaba al cuidado -se dijo- de su padrastro. Al día siguiente fue encontrado su cadáver.
Se presumió que murió a causa de múltiples heridas con arma blanca.
Según las primeras informaciones el mismo padrastro había denunciado la desaparición pues estaba a cargo de su cuidado y custodia, en tanto su madre trabajaba en una planta de la industria maquiladora.
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Ahí recibió la noticia de la desaparición, en medio del turno laboral. Su casa, de pequeñas dimensiones, es de reciente construcción, obtenida, presumiblemente, por un crédito de interés social.
El padrastro fue detenido como presunto responsable, primero, de la omisión de cuidados y luego como presunto culpable del homicidio.
Hasta ahí parecía un caso semejante a lo que ocurre con alguna frecuencia en las dos urbes mayores de Chihuahua.
La indignación corrió paralela a los detalles de la desaparición, del asesinato y a los comentarios desatados por algunos de los vecinos de madre e hijo que revelaron un caso más de violencia doméstica, maltrato........
© El Diario
