Juan Hurtado Cano

Naciones Unidas se ha convertido desde hace varias décadas en una vergüenza que sólo sirve de mejor tribuna a los más caracterizados criminales de la humanidad, como han sido dictadores que le han dado rienda suelta al demonio del verbo con sus diatribas contra el mundo libre occidental y que tratan tapar, sin el más mínimo reato de sus negras conciencias, las tragedias a donde han llevado las naciones que ha subyugado con sus perversas decisiones. Veamos algunos casos: el dictador soviético Nikita Khruschev, cómplice y sucesor del mayor criminal del mundo, el sátrapa Josef Stalin, arma su show en Naciones Unidas, quitándose su zapato y golpeando el atril con su pecuecudo olor para insultar al Presidente Kennedy, que salvó al mundo del holocausto nuclear con el inolvidable papa Juan XXlll, con su Pacis in Terram, cuando estaba instalando misiles en su Cuba sometida, arropando al otro criminal mayor del continente, Fidel Castro, que nos legó más de sesenta años de hambruna, represión, sangre, sudor y lágrimas a ese gran pueblo y que visité para constatar con mis propios ojos su dolor infinito.
Y sigue el otro bárbaro y lunático criminal de Chávez que también nos dejó ocho millones de refugiados por el mundo, de ellos dos en Colombia, que acogimos porque son nuestros hermanos y de contera a este otro sátrapa y cobarde de Maduro y el narcotraficante de Diosdado, mimados y defendidos por el señor Petro, que también se despachó esta semana........

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