EL EMBOLATE DEL DEPORTIVO PEREIRA
Jaime Cortés Díaz
La pereiranidad representa la manera de expresar el afecto y la pertenencia hacia la ciudad, procurando su progreso y la práctica de sus más nobles valores cívicos. Los pereiranos, por nacimiento o adopción, comparten un espíritu libertario que genera lazos de gratitud y corresponsabilidad duraderos. Así, ante la ausencia de los poderes centrales, la comunidad emprendió, con alma y cuerpo, obras de desarrollo “sin fuerza extraña que agradecer”.
Bajo el impulso de los tradicionales convites, los ciudadanos se movilizaban con entusiasmo y disciplina para materializar sus anhelos. Entre esos proyectos emblemáticos destaca el Estadio Olímpico, luego llamado Hernán Ramírez Villegas en honor a uno de sus grandes gestores. Su construcción no solo respondió a los X Juegos Nacionales, sino también a la proyección cultural y deportiva de la región. En especial, se concebía como la casa moderna del Deportivo Pereira, bajo el liderazgo de Francisco Polanco Ripoll (Q.E.P.D.), presidente de la Corporación Centenario, quien impulsó su edificación. Polanco escribió en su libro que en el periódico PREGÓN, dirigido por este columnista, se consignó, tras la inauguración del 20 de mayo de 1971: “Se montó un espectáculo humano monumental, un marco esplendoroso para un acontecimiento histórico inolvidable”. Y añadió: “No podía ocurrir cosa distinta, pues cuando una comunidad se une en torno a un propósito, los resultados tienen que ser fructíferos”.
Este recuerdo sirve de antesala a la difícil situación que hoy enfrenta nuevamente el Deportivo Pereira por el incumplimiento en los pagos laborales a su plantilla. A pesar de los problemas de antes, el Club continúa siendo, como decía Polanco, “el símbolo de la ciudad y el que convoca a miles de aficionados cada vez que juega en su estadio”. Sin embargo, la ciudad es ahora objeto de comentarios nacionales por el bochornoso impase, que ya ha derivado en intervenciones legales. Señala un editorial de El Diario del Otún: “Nada mina más la confianza en los directivos y lleva a una lamentable situación que no hace honor a los........





















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