Cuestiones de ecolingüismo
Personas caminando por la calle Castillo de la capital tinerfeña. / María Pisaca / MARIA PISACA
No suelo ser partidario de adoptar actitudes derrotistas o desalentadoras cuando detecto algún motivo que pudiera delatar la pérdida de algún elemento caracterizador de nuestro dialecto, a causa, sobre todo, de la globalización que nos circunda y que se manifiesta en el desconocimiento o en la infravaloración que ante nuestro patrimonio lingüístico muestran algunos hablantes canarios. Prefiero seguir creyendo que el arraigo y nuestro sentimiento identitario es una fuerza que compensa sobradamente los peligros de una hipotética disolución del dialecto.
Observo que ningún hablante canario competente, y seguro de que su modalidad es tan válida como cualquier otra, rechaza guagua, alongarse y desinquieto para decantarse por autobús, asomarse e inquieto. Incluso creo que aquellos que por mimetismo (postureo o ignorancia) hacen uso de un injustificado ‘vosotros’, renuncian a él y vuelven al ‘ustedes’ una vez superada la etapa de inseguridad que es característica de determinadas edades, o por circunstancias que los impelen a renunciar a lo propio por una excesiva valoración de normas foráneas consideradas erróneamente más prestigiosas. Sin embargo, me tropiezo en ocasiones con algunos ejemplos que obran en dirección contraria, como las respuestas de unos jóvenes que, ante una encuesta que se realizaba para un programa de televisión, no supieron responder a las preguntas de cuáles eran los significados de canarismos como jeringarse, magua, machango y jeito, y, entonces comprendí que la realidad no era es tan optimista como yo la imaginaba.
He tenido que dar la........





















Toi Staff
Sabine Sterk
Gideon Levy
Penny S. Tee
Waka Ikeda
Mark Travers Ph.d
John Nosta
Daniel Orenstein