Estamos muy mal
En el último mes, cuatro publicaciones internacionales han vuelto a constatar la profunda crisis por la que atraviesa nuestro país en todos los ámbitos. Primero fue el Artículo IV del FMI que concluía que: “La combinación de importantes desequilibrios fiscales, caída de las exportaciones de gas natural, pérdida de acceso a mercados internacionales y la continua monetización del déficit... ha erosionado la competitividad, agotado las reservas y dejado a Bolivia en una posición precaria”. Señalaba asimismo que la pobreza podría aumentar significativamente si se produce un ajuste desordenado, por la reducción abrupta del gasto público; alza de precios por devaluación y reducción de subsidios y; disminución del ingreso real de los hogares.
Después fue la FAO que, en su informe “Puntos críticos del hambre”, publicado hace unas semanas, sentenció que: “(En Bolivia) se espera que la inseguridad alimentaria se deteriore durante el período junio a octubre de 2025, debido a la alta inflación sostenida y la disminución de las reservas de divisas. Se proyecta que esto continuará erosionando la capacidad de importación y el poder adquisitivo de los hogares, lo que limitará aún más el acceso a los........
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