Cara a cara
La presencia del crimen organizado en Bolivia dejó de ser una conjetura desde que el nombre de Sebastián Marset irrumpió con fuerza en 2023. A partir de entonces, secuestros, ejecuciones con sello de sicariato y hallazgos de arsenales revelaron que el país no solo es ruta, sino también refugio de redes criminales. Sin embargo, las autoridades insisten en minimizar lo ocurrido, reduciendo los........
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