¿Queremos un cambio o queremos cambiar?
Los bolivianos repetimos hasta el cansancio que queremos un cambio. Lo gritamos en las todos lados, en las redes sociales y en las conversaciones cotidianas. Decimos que queremos un país distinto, sin Evo Morales, sin el MAS, sin corrupción, sin impunidad, sin burla al ciudadano. Pero en el fondo, ¿de verdad queremos cambiar? ¿O solo queremos que se vayan ellos para que vengan otros a ofrecernos más de lo mismo, pero con mejores modales?
El MAS no inventó la corrupción. La perfeccionó, la estructuró, la oficializó. Pero el país del “vengase mañana”, de la coima por debajo de la mesa, del “tengo un amigo en el gobierno”, del favoritismo político, del puesto conseguido por militancia y no por mérito, ya existía. Bolivia ha sido, desde hace décadas, un país acostumbrado a normalizar la trampa, la viveza criolla, la impunidad........© El Día
