Eso tan raro de votar con ilusión
Querida gente suscrita:
Hace mucho tiempo en una galaxia muy, muy lejana… pongamos que era Galicia en la primera década de este milenio, un amigo, el diseñador y activista de internet Berto Yáñez, hizo circular el logotipo de un nuevo partido: el PVBE (Partido de los que Votan al Bloque por Eliminación). Me ha venido a la cabeza estos días porque, como sabrán, y si no para eso me tienen, este domingo 2.693.624 personas elegiremos presidente (o presidenta) de Galicia. En aquellos años del cambio de milenio, en la galaxia lejana gobernada por el emperador Fraga, sólo existían tres corrientes políticas y tres opciones electorales: quienes no se sentían ni conservadores ni socialdemócratas tenían como única opción el nacionalismo de izquierdas (la última vez que se había presentado en solitario Izquierda Unida, con una joven abogada llamada Yolanda Díaz como candidata a la presidencia, había obtenido 16.441 votos).
Todo cambió con el 15M. En 2012, el BNG implosionó. Ese mismo año, antes de que surgiese Podemos, la coalición entre aquella Yolanda y los seguidores del líder histórico del nacionalismo, Xosé Manuel Beiras, se situó como tercera fuerza parlamentaria, condenando al BNG a ser la cuarta. En las siguientes, los sucesores de aquella coalición, las Mareas, ascendieron al liderato de la oposición, rebasando al PSdeG-PSOE. Al BNG los sondeos más optimistas le concedían cuatro escaños y los más realistas, uno o la desaparición. La entonces recién estrenada candidata, Ana Pontón Mondelo, salvó los muebles y obtuvo seis, quizá porque en el debate electoral se comió a sus cuatro rivales, Feijóo incluido. En 2020, los sondeos aventuraban que doblaría resultados, 13 o 14 escaños, pero los triplicó: 19. Los socialistas........
© CTXT
visit website