“No se trata de verter lágrimas sino de quitarnos las garras de encima”. Esta es la última frase en la larga carta a la ciudadanía que Carles Puigdemont redactó desde Waterloo el pasado día 3. La misiva contiene resquemores, mucha amargura y un gran desgarro político que le ha provocado el conocer el apoyo de ERC a Salvador Illa para que este pueda ser nombrado presidente de la Generalitat. Sin embargo, es un acuerdo que parece condenado al fracaso porque las promesas económicas de Pedro Sánchez no podrán llevarse acabo legalmente en su mayoría, y se demuestra que una vez más todo responde a una estrategia del “sanchismo” para mantenerse en el poder.

Las epístolas están de moda, por un motivo u otro, y esta de Puigdemont también es bastante estrafalaria, se podría añadir incluso, que es falsaria. En lo que coincide con la carta escrita hace unos meses por Pedro Sánchez es en el claro victimismo que intentan sugerir........

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