En el corazón del barrio de Chamberí late una de las joyas patrimoniales más singulares de Madrid: el frontón Beti Jai. Este edificio, testimonio excepcional de la arquitectura del siglo XIX y del auge de la pelota vasca en la capital, ha pasado de ser un espacio olvidado y amenazado por la especulación, a reabrirse parcialmente tras años de esfuerzo ciudadano y una notable inversión pública. Sin embargo, su futuro vuelve a estar en riesgo.

La historia reciente del Beti Jai es también la historia de una victoria ciudadana. Su recuperación fue posible gracias al incansable trabajo de colectivos como Salvemos el Frontón Beti Jai y Madrid, Ciudadanía y Patrimonio, que lograron su declaración como Bien de Interés Cultural en 2011 y promovieron su expropiación en 2015.

Este frontón ha recibido una inversión pública cercana a los 40 millones de euros. Para entender su magnitud: equivale al coste de construcción de 12 escuelas infantiles, 5 centros culturales, 4 bibliotecas o 3 polideportivos.

En 2024, el frontón abrió parcialmente sus puertas con visitas........

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