El odio no soluciona nada a nadie
El odio como herramienta política, ha sido usada en todos los tiempos por su eficacia y facilidad de provocar: Mussolini, Hitler, Orbán y Bolsonaro.
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El odio es una poderosa fuerza opuesta y entrelazada con el amor. Ambos activan el putamen y la corteza insular, áreas del cerebro donde se procesan las emociones. Por resonancia nuclear magnética funcional, sabemos que el amor anula en la corteza prefrontal el sentido crítico (el amor es ciego), mientras que el odio activa el córtex cingulado anterior, asociado a la toma de decisiones planificadas y agresivas. La mitología, las leyendas, los poemas, las canciones, la filosofía, la sicología y la ciencia han........
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