Los avances tecnológicos y el ser humano
Al deambular por las vías vehiculares de nuestras ciudades, el observador capta una actitud de los colombianos del siglo XXI: detestan la quietud, el tener que esperar. Impacta la desesperación de los automovilistas y, más agudamente, de los motociclistas durante el minuto o dos que demora la luz roja de un semáforo en pasar a verde. No saben esperar, les fastidia durar 60 segundos “sin hacer nada”.
Lo mismo se percibe en los sitios en que se debe hacer fila y en las salas de espera de las oficinas estatales o privadas: les exaspera la quietud, les altera, se aburren.
¿Acaso no fue el “no hacer nada” lo que posibilitó la concepción de nuevas ideas, de las que........
© Vanguardia
