Duelo de chistes, por Marcial Fonseca
Su amistad nació cuando cursaban tercer grado de primaria en el Grupo Escolar José Antonio Álamo de Duaca, Lara. Sus rutinas como discentes eran las mismas: asistir a clases, disfrutar el recreo a las diez de la mañana, ir a casa a las once y media, almorzar y regresar al aula exactamente a las dos. Las tardes generalmente les producía modurria tanto a ellos dos como a los docentes. Terminaban a las cuatro y retornaban a sus respectivos hogares.
Finalizada la primaria, ambos se inscribieron en el Instituto Nocturno Comercial para estudiar Administración y Contabilidad. Terminada la carrera, consiguieron trabajo en el central azucarero local al mismo tiempo que se identificaban con el partido político principal del país. Y se sumergieron en la política del pueblo, participaron en unas elecciones municipales y fueron electos ediles.
Sus primeros pasos fueron........
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