Una mesa directiva del Congreso a la medida de sus infamias
Con todo el barullo de las actividades protocolares por Fiestas Patrias, ha pasado desapercibida la elección del presidente del Congreso, José Jerí, y los serios cuestionamientos de investigaciones por delitos graves; además que no cumple con fundamentos éticos que evidentemente exigen la solvencia moral, la probidad e integridad para asumir cargos de mayor responsabilidad, como es el caso de la presidencia del Parlamento.
Que tenga en marcha un proceso de investigación por delito de violación sexual —delito común— y otro por desbalance patrimonial, como delito de función —presuntamente relacionado con la Comisión de Presupuesto que presidió—, descalifica a........
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