Idea y chupito para todos
El otro día, un señor con un gran parecido a Iniesta abrió un libro en una cafetería y del libro saltó una idea que salpicó en toda la cara a varios de los desayunantes. Uno de ellos, hombre atildado y con aspecto de haber estudiado a fondo la lista de los reyes godos y las dinámicas inversoras chinas en occidente, sacó un pañuelito de la chaqueta, lo agitó con energía de capitán prusiano y cuando logró estirarlo lo pasó por su faz, que no quedó limpia del todo y sí trasmutada y menos rígida. Contraviniendo su costumbre, pidió un tequila al camarero. Camarero que, por cierto, aspiraba a ser cronista oficial de su ciudad.
Una señora a la........
© La Opinión A Coruña
