Lamentable que en la recta final de la administración Petro no se haya concretado algún cambio sustancial en aspectos políticos, sociales o económicos; el cuestionado Congreso y la perversa interdependencia de las tres ramas del poder continuarán igual; el panorama laboral seguirá deteriorándose pues el sector informal, el más numeroso y desprotegido para nada se ha tenido en cuenta; medidas contra la desigualdad, pobreza o falta de oportunidades se basan en el fracasado asistencialismo de gobiernos anteriores; la paz total seguirá siendo una quimera pues los grupos subversivos, delincuencia organizada y común disponen de un ejército de jóvenes........

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